Raza Payoya

La Raza Payoya

La cabra Payoya es una raza autóctona andaluza, catalogada en peligro de extinción, que ha sido tradicionalmente explotada en la zona del actual Parque Natural de la Sierra de Grazalema y Sierra de Ronda, zonas de gran valor natural

La Raza Caprina

Payoya

La cabra Payoya es una raza autóctona andaluza, catalogada en peligro de extinción, que ha sido tradicionalmente explotada en la zona del actual Parque Natural de la Sierra de Grazalema y Sierra de Ronda, zonas de gran valor natural, constituyendo el sustento de muchas familias de las comarcas.

El nombre de Payoya tiene su origen en el municipio de Villaluenga del Rosario, de la provincia de Cádiz, uno de los lugares cuna de la raza, donde a los nativos se les denomina «Payoyos» y, por extensión, se aplicó este nombre a esta raza caprina. No obstante, la raza también es conocida como «Montejaqueña», por el municipio malagueño de Montejaque ubicado en la comarca natural donde se desarrolla la raza.

La cabra Payoya sigue manteniendo las aptitudes necesarias para convivir y producir en un medio duro y cambiante, siendo fuente de productos con los que comparte una magnífica y única personalidad.

Origen de la Raza

El Origen no está determinado

No obstante, se supone que la cabra Payoya fue el resultado de la conjunción de los troncos Alpino y Pirenaico que recibe la influencia del tronco convexo, influencia necesaria para su adaptación a las zonas de sierra donde habita (Herrera et al, 2007).

Elementos fundamentales

En la formación de la raza Payoya han intervenido dos elementos fundamentales: por una parte el criterio selectivo aplicado por los ganaderos, dirigido a la mejora de la producción de leche en sistema de pastoreo y, por otro lado, las características agroclimáticas particulares de la zona de explotación, con un clima de elevada pluviosidad y una oreografía difícil.

Características Morfológicas

Cabra muy rústica, de gran alzada y longitud

La Raza Caprina Payoya, en una descripción morfológica breve, destacaremos que son animales muy altos y largos, reflejo de la selección que han hecho los ganaderos buscando un formato de animales que les permitiera el aprovechamiento de pastos en zonas de difícil acceso en la sierra.

de marcado dimorfismo sexual

Tal y como consta en el Patrón Racial de la Raza, son animales de perfil subconvexo, hipermétricos y de proporciones longilíneas. La selección encaminada hacia una aptitud láctea pudo constituir la base de la escasa variación morfoestructural observada.

Gran variedad de Capas

con Nomenclatura particular

Otro aspecto que destaca en estos animales es la gran variedad en capas, teniendo cada una de ellas una nomenclatura particular, y, aunque para ojos no acostumbrados pudiera parecer que se dan todo tipo de pelaje, no es así, contemplándose en un rebaño las distintas capas existentes con sus variantes.

Capas no uniformes

Se seleccionan en función de capas no uniformes, siendo un criterio identificativo de la raza la gran variedad de capas existentes, pudiéndose encontrar capas compuestas uniformes (nevadas y cárdenas), compuestas discontinuas (berrendas, oritas, sesnegras, collalbas y bayas) y capas simples (coloradas, negras, rubias y blancas).

Características Productivas

Producción Lechera excelente

Se trata de un animal que, moldeado por el ganadero para responder a sus necesidades, es capaz de ofrecernos producciones lecheras excelentes, base de una importante tradición quesera, con esa impronta tan característica fruto de esta relación particular entre el medio, el animal y el hombre.

Carne Saludable

No debemos olvidar la producción de carne, cabritos alimentados en la mayoría de los casos únicamente con leche materna, destacándose como una carne saludable y con los matices necesarios para brillar en platos, desde los más sencillos a los más sofisticados.